Sobre el comunicado de Femsa-Heineken y la suspensión del proyecto del Estadio

Aunque FEMSA, vía José González Ornelas, exprese hoy en la prensa que su proyecto de estadio es ecológico, lo que ocurre establece lo contrario.

No es “ecológico” decretar un área natural protegida como excusa para construir un estadio. Para que esa obra pudiera realizarse en el bosque, fue necesaria la creación del Nuevo Parque Ecológico La Pastora como pretexto para esa construcción. En el decreto que origina la zona protegida, fueron excluidos de la misma los terrenos correspondientes a la construcción de esa edificación. Chapuza que daña nuestro patrimonio natural.

No es ecológico el estadio cuando se hacen desmontes y exploraciones de suelo sin tener las autorizaciones ambientales requeridas. El hacer cambio de uso de suelo sin el resolutivo relacionado, agregando a esa depredación el no realizar la mitigación del impacto ambiental asociado, son acciones que impactan la ya de por si área perturbada del bosque de La Pastora.

¿Cómo pretende FEMSA decir que el estadio es un proyecto de beneficio a la comunidad, si esta basado en el manejo torcido de herramientas de conservación como la creación de áreas naturales protegidas, o en el incumplimiento de requisitos básicos que garantizan el cuidado de la biodiversidad del bosque, como son las autorizaciones de impacto ambiental o cambio de uso de suelo en terrenos forestales? El beneficio de la comunidad esta representado por el derecho a un medio ambiente sano que ha sido vulnerado en el bosque de La Pastora por quienes promueven ese proyecto, y en consecuencia, esa obra nunca puede ser declarada como ecológica.

José Ornelas debe saber que no se requiere la construcción de un estadio de 200 millones de dolares, para justificar “la plantación de 1200 especies nativas de larga vida”, como lo publica en la prensa hoy. Esa magnitud de verde no requiere una inversión tan excedida.

¿Requerimos que FEMSA gaste 200 millones en un terreno de la ciudadanía -el bosque de La Pastora-, para justificar el “establecimiento de 20 mil metros cuadrados de jardines captadores de lluvia”, en un territorio que ya cumple esa función?

200 millones de dolares para justificar tan poca revegetación bajo ningún concepto es ecológico o sustentable. Que lo hagan en la cervecera de FEMSA, que bien le haría el verdecimiento, pero no en el bosque de tods. O mejor aún, 200 millones de dolares son de beneficio a la comunidad, por ejemplo, si se invirtieran en el Sistema Nacional de Áreas Naturales Protegidas. Eso si sería “ecológico”.

FEMSA públicamente se sorprende de la clausura del territorio de La Pastora por la PROFEPA, pero convenientemente olvida los desmontes por apertura de brechas y perforaciones del suelo hechas en el área que quieren arrebatarle a la ciudadanía para construir su estadio, y que han originado esa clausura. Olvido pertinente de esa empresa, que de paso les sirve para sostener con base falsa el pretendido estatus ecológico de ese proyecto. A pesar de tan evidente infracción a las leyes ambientales, cínicamente la empresa de bebidas expresa en su comunicado “que siempre han actuado dentro del marco legal y a favor de la comunidad”. Es congruente esa empresa, porque se mantiene en la simulación y la chapuza que hace gala, todo para caprichosamente construir el estadio en el patrimonio natural de la ciudadanía.

Si FEMSA en verdad quiere contribuir al desarrollo de la comunidad, como lo hizo público hoy, debe integrar a su decisión de suspender temporalmente la construcción del estadio, el retirar la solicitud de obtener en comodato el terreno, hecha al Congreso de Nuevo León para construir esa obra, y de ese modo, revertir el daño causado.

Si esa empresa realmente busca “apoyar el interés común de beneficiar a a la comunidad”, y considerando la desmedida atención que ha mostrado por La Pastora, sería auspicioso que financiara la restauración ecológica de la zona a lo más cercano posible de las condiciones naturales originales del bosque, para entonces si demostrar que actúan “a favor de los intereses de la comunidad a quien deben toda su historia”.

Antonio Hernández.
Movimiento Ambientalista Ciudadano.
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