Por: Ángel Séndic Tovalín
Monterrey.- Quiero expresar como Consejero Consultivo para el Desarrollo Sustentable de Nuevo León, mi profundo desacuerdo con el proceder de la delegación de la Semarnat en este estado. El haber anunciado la autorización a la MIA para despojar a la ciudad de un área natural de gran valor ambiental y social, es una afrenta que no tiene ninguna justificación válida, y peor aún con las maneras en que actuó. En teoría esta autoridad debiera conducirse apegada a la misión de proteger y salvaguardar los valores y recursos ambientales para el bien común de los ciudadanos, sin embargo ha quedado de manifiesto que su propósito es otro muy distinto, se ha comportado como un agente al servicio de intereses privados y ecocidas. Su proceder resulta una afrenta y una burla hacia la legalidad y el estado de derecho.
Miembros de Consejo Consultivo nos hemos tomado con toda la seriedad que amerita este cargo honorario de ser asesores ciudadanos para la institución, sin embargo con el albazo de esta autorización, irresponsablemente ignora y desprecia no solo la propia recomendación que realizamos, si no también todas las opiniones técnicas vertidas durante la Consulta Ciudadana, donde se argumentaron con toda claridad la inviabilidad del proyecto, y por si fuera poco, esta delegación se ha mostrado servil para proteger a la empresa de ser exhibida públicamente, al negar sin razones ni justificación válida la realización de la Reunión Pública Informativa, habiendo existido condiciones sobradas paraqué esta se efectuara.
Al haber negado este derecho ciudadano de cuestionar el proyecto públicamente queda muy claro para quién trabaja esta dependencia.
No se puede dejar pasar por alto esta burla y este desprecio hacia la genuina participación social en la toma de decisiones que nos afectan a toda la comunidad de esta ciudad, por ello exijo a nombre de los consejeros que validamos la recomendación para negar los permisos para la construcción de un estadio en la Pastora, que la delegada estatal de la Semarnat renuncie a su cargo de servidora pública. De no hacerlo, de ninguna manera seremos parte de esta farsa. Si no se va la delegada, este Consejo no tiene ninguna razón para continuar existiendo, y quien se preste a seguir el juego y la burla, lo hará bajo su propio riesgo de dignidad.
Emplazamos a la delegada para que a más tardar este lunes 15 de agosto presente su renuncia o de lo contrario se dará por terminado este sainete de simulaciones en el que nos pretenden convalidar como Consejeros de una autoridad incompetente y sorda para la ciudadanía pero servil a los intereses corruptos y depredadores.
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